Sheena
se bajó de su coche y suspiró. Una semana de felicidad absoluta. Fuera del
trabajo, lejos de la ciudad... sólo rodeada de la naturaleza y tranquilidad.
Teresa gritó al llegar a la orilla del lago.
- ¡Ay
que asco! ¡Hay peces muertos aquí!
-
¿Qué esperabas tonta, es un lago. Es probable que haya algunos animales
alrededor, ya sean vivos o muertos. Y solo es un pececito, ¡exagerada!
David,
su novio se había colocado detrás de ella, abrazándola con fuerza. Sheena
suspiró cuando los vio, ella quería eso... Una relación asi. Lo deseaba con
todas sus fuerzas.
- ¡Hey
soñadora!
Jace,
su mejor amigo le pasó el brazo por los hombros.
-
¿Qué piensas del lugar, eh? Es perfecto, ¿o qué?
Ella
miró a su alrededor y tenía que darle crédito, el lugar era increíble. En medio
de un gran parque natural, seis cabañas de madera estaban esparcidas alrededor
del lago. Habían alquilado la más grande, para 8 personas, a pesar de que sólo eran
siete. Ella había querido reservar sus vacaciones sola e ir a alguna playa
lejana, pero Jace no la dejaba. Así que había organizado estas vacaciones en grupo
con todos sus amigos, bueno... casi todos ellos. No era lo mismo que ir sola...
pero ella disfrutaría de todos modos.
- Es
increíble Jace, de verdad.
- Vamos
a tener que salir a caminar, ¡hay pequeños senderos preciosos por todo el lugar!
El echó
un vistazo a su teléfono con nerviosismo.
- ¿Quieres
ir dentro y dejar tus cosas?
-
Claro. ¿Está todo bien?
- De
puta madre. Vamos nena.
Entraron
en la cabina con sus bolsas y miraron las habitaciones. Como de costumbre
Teresa y David estarían juntos en una habitación, al igual que Jace y Steve y
las gemelas Kim y Amy. Porque a pesar de que Amy y Steve estaban juntos, Kim y
Jace no lo estaban por lo que Kim prefería quedarse con su hermana... en lugar
de compartir una habitación con Sheena.
Pero
bueno, ¿quién era ella para juzgar?
Eso
la dejaba a ella sola, pero a ella no le importaba en absoluto. Ella se quedo
con la única habitación que quedaba libre y bajó para ayudar a las chicas a
guardar todas las compras que habían traído. Habían comprado comida para una
semana, planeaban tener barbacoa casi todas las noches, era lo mejor para unas
vacaciones así. Los chicos estaban colocando la barbacoa y preparando las mesas
y los bancos fuera y ella vio como Jace comprobaba su teléfono otra vez. ¿Qué le
estaba pasando?
Amy
la abrazo.
- Hey
nena. ¿Te gusta tu habitación?
- Sí,
está bien. Perfecta para mí, ya que tiene una bonita y enorme cama doble toda
para mí.
-
Oye, tal vez te podrías cambiar conmigo, para que yo y Steve...
-
Olvídalo Amy, ¡te quedas conmigo!
Amy
puso los ojos en blanco al oír a su hermana y sonrió mientras los chicos
entraban de nuevo en la cabaña.
-
¿Chicas queréis ir a la ciudad? ¿Dar un paseo, echar un vistazo?
Todas
las niñas asintieron entusiasmadas, pero Sheena negó con la cabeza.
- Yo
me quedo. Quiero ir a nadar.
- Ay qué
asco, pero hay peces muertos ahí Sheena!
-
Creo que me las arreglaré.
Jace
miró su teléfono de nuevo y Sheena le dio un golpe en el brazo.
-
¿Qué te pasa con ese teléfono?
Steve
interferido antes Jace pudo contestar.
- Oh
tio, ¿no se lo has dicho?
-
¿Decirme el qué?
Jace
miró al suelo.
- ¿Jace?
¿Que no me has dicho?
- Uhm,
no te vayas a enfadar, ¿vale? Yo ah… le dije a Damian que veníamos aquí.
- ¿Tu
hermano?
- Sí.
Me comento que quería venir. Así que le dije que estaríamos aquí.
-
Déjame ver si lo entiendo. Tu hermano, que me odia con pasión, viene aquí, a
pasar las vacaciones?
-
Sheen, ¿qué iba a decir? "No, no puedes venir'…
-
Podrías habérmelo dicho Jace. Una advertencia habría sido agradable.
- Pero
entonces no habrías venido.
- ¡Pues
claro que no!
Parecía culpable, pero Sheena no podía dejar que le molestara. Damian se uniría a ellos. Él se iba a quedar en la misma cabina que ella... su corazón dio un
vuelco ante la idea.
-
¿Cuándo va a venir?
- No estoy
seguro. Estoy esperando que me llame para dejarme saber que está en camino.
- ¿Él
sabe que estoy aquí?
- Lo
sabe.
- Muy
bien. Simplemente genial.
Sheena
suspiró profundamente. Tenía que hacer todo lo posible para intentar disfrutar
de sus vacaciones, aunque el hombre que la odiaba iba a venir a arruinarlas.
- Oh,
bueno. Iros a la ciudad, yo me voy a nadar.
-
¿Estás seguro de que quieres estar sola? – Le preguntó Amy.
- Sí,
claro. Él no está aquí todavía. Asi aprovecho para disfrutar de las pocas horas
de paz que me quedan. Estaré bien.
-
¿Seguro que no quieres que me quede?
-
Estoy segura Jace. Necesito un poco de tiempo a solas en estos momentos. Me
hará bien.
- Lo
siento.
- Lo
sé.
Él la
abrazó y antes de que ella se diera cuenta, todos se habían ido y ella se quedo
sola. Se tomó su tiempo preparándose, poniéndose su nuevo bikini y eligiendo un
lugar fuera para tumbarse y tomar un poco el sol. De vez en cuando se daba un
baño rápido en el lago antes de volver a su toalla y el libro. Miró a su
alrededor, completamente relajada. Esto era exactamente lo que necesitaba.
un trio, me encanta la idea je je
ResponderEliminarDonde ves el trio Ana?? :) jejeje siento decepcionar...esas historias me las estoy guardando para el año que viene :D
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