martes, 22 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 32


Carlos la miro detenidamente mientras los sonidos de la película sonaban de fondo.
Sandra no parecía una mujer satisfecha. Parecía enfadada. Frustrada. Y excitada.
Y su hermano podía ser todo lo vainilla que quisiera pero una cosa era segura, dejaba a sus mujeres satisfechas, siempre.
Así que… si no habían estado follando, ¿que había estado haciendo su hermano en casa de Sandra?
Se lo tendría que preguntar.
Después.
Antes, tenía que poseerla.
Hacerla suya.
Hacerla olvidar de que Rafa existía.
Empezó a desabrocharse la camisa sin desviar la mirada de Sandra. El modelito que llevaba era impresionante, muy sexy y diseñado para seducir. Resaltaba todas sus curvas y hacia que Carlos quisiera arrancárselo a bocados.
Ella alternaba la vista entre su mano, que dejaba cada vez más piel al descubierto y la peli. Se lamia los labios, nerviosa.

- ¿Te gusta lo que ves?

Su mirada volvió a él y asintió.

- Parece… doloroso.

Él sonrió.

- No lo es, si se hace bien. ¿Y Sandra?
- ¿Si?
- Yo lo sé hacer bien…

Ella abrió la boca en un jadeo silencioso y aunque se le acelero la respiración, arqueo una ceja.

- ¿Tan seguro estas nene?

Ella se acercó a él, subida en esos taconazos de vértigo, y apoyo las manos en su pecho ahora descubierto. Subió las manos por sus pectorales hacia sus hombros, quitándole la camisa y dejando que esta cayera al suelo.
Le estaba empezando a costar trabajo respirar y su cuerpo pedía a gritos que tomara el control, pero dejo que ella siguiera con su asalto.
Sus uñas arañaros suavemente sus brazos y bajo hasta su cintura, para luego llegar a la bragueta de sus vaqueros. Si no le desabrochaba el pantalón ya, estallaría. Jamás había estado más duro…
Sandra le bajo la cremallera y a la vez inclino la cabeza para lamerle un pezón, haciéndole gruñir.

- ¿Carlos?
- ¿Hmmm?
- Si tan seguro estas…

Subió lamiendo por su cuello, hacia su oreja y le lamio juguetona antes de susurrarle.


- … demuéstramelo.

lunes, 21 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 31

Sandra miro su móvil extrañada. ¿Qué coño le pasaba a Carlos?
Seguro que había visto salir a Rafa de su casa y en vez de entrar y preguntar, el solito se había montado una historia en su cabeza…
Su móvil volvió a vibrar con un mensaje.

Seré un gilipollas pero tú eres una viciosa. ¿Te gusta cómo te folla mi hermano o prefieres alguien menos vainilla, como yo?

Definitivamente había visto a Rafa y sacado sus propias conclusiones. Ay Carlos… pero que tontorrón era. Seguro que había ido a su casa solo para ahogar sus penas en el alcohol, en vez de comprobar que sus sospechas eran completamente infundadas.
Sonrió para sí, tendría que ir a demostrarle lo equivocado que estaba.
Se cambió de ropa, cogió las llaves, incluyendo las de casa de Carlos, y le mando un mensaje antes de arrancar el coche.

Prepárate capullo, porque te vas a enterar de lo viciosa que puedo llegar a ser.

De camino a su casa le llego otro mensaje, pero pasó de leerlo. ¿Pero que se creía este?
Aparco y entro en casa de Carlos con la familiaridad que le otorgaba el ser su amiga de toda la vida, era casi como estar en su propia casa.
Escucho gemidos en el salón, así que se dirigió allí, para quedarse estupefacta.
¡Carlos estaba viendo una peli porno! Y una bastante intensa además…
Tenía un vaso de whisky en una mano, el móvil a su lado en el sofá, y la otra mano sobre el bulto que ocultaban los vaqueros entre sus piernas.

- ¿Y ahora quien es el vicioso?

Sandra sonrió traviesa. Estaba excitada. Era de las pocas mujeres, según las estadísticas, que veía este tipo de películas y las disfrutaba. Y no se avergonzaba de ello.  Cuando Carlos la miro, casi se corre ahí mismo.
Estaba serio y enfadado. Y muy, muy cachondo.
Dejo la copa en la mesita y se levantó para caminar hacia ella. Sandra se lamio los labios, la mirada de Carlos prometía un castigo.

Un castigo muy placentero…

domingo, 20 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 30

Una semana después…

Carlos no se podía creer que hubiera tenido que pasar toda la semana fuera de la oficina… A veces realmente odiaba su trabajo. Solo había tenido el tiempo justo de avisar a Sandra de que se tenía que ir, pero no habían podido hablar de lo suyo. Y tenían que hablar. Porque ese comentario de que saludara a su ´cuñado´ aun lo tenía intrigado. ¿Qué había querido decir Sandra con eso?

Su avión estaba a punto de aterrizar y puesto que era viernes, antes de despegar había mandado un mensaje a Sandra para avisarla de que iría a su casa. Necesitaba verla y necesitaban hablar de una vez por todas.
Cogió su coche y cuando llego a la calle donde vivía Sandra no se pudo creer lo que estaba viendo.

Su hermano Rafa salía de casa de Sandra con una sonrisa de lo más satisfecha. Lo vio meterse en su coche y marcharse.
Carlos no sabía qué hacer, si exigirle una explicación a Sandra, si pedírsela a su hermano o mandarlos a los dos a la mierda directamente.
Joder… con lo que había ocurrido antes de su viaje en la oficina… por un instante había tenido la esperanza de que…

Dio un puñetazo al volante.
¿Qué demonios hacia Rafa en casa de Sandra?
Arranco el coche y salió de allí como alma que lleva el diablo.
Llego a su casa en un santiamen y sin molestarse en encender las luces fue hacia su mueblebar para echarse una generosa copa de whisky.

Su móvil pito con un mensaje de Sandra.

Te queda mucho nene? Te estoy esperando impaciente.

¿Pero que…? No dudo en responderle.

Eres insaciable. No has tenido suficiente con uno de nosotros?

Perdona? De que hablas?

Encima se hacia la tonta… esto era absurdo. Carlos se echo otra copa y le mando otro mensaje.

Lo sabes perfectamente. Que pasa, mi hermanito no ha sido capaz de satisfacerte? Lo vi salir de tu casa muy contento. No soy tonto.

No sabes de lo que estas hablando. No eres tonto no, eres un gilipollas.


Y un cobarde.

viernes, 18 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 29

Sandra miro a Carlos directamente a los ojos mientras este hablaba con su hermano. Sabía que la estaba poniendo a prueba, intentando averiguar lo que ella sentía por Rafa. Lo conocía mejor que a sí misma.
Quería moverse ya que Carlos seguía duro en su interior, pero la mano en su cadera se lo impedía.

- Ya lo hemos hablado, ¿porque quieres que Laura siga siendo tu secretaria?

Sandra sonrió y asintió con ganas. Se inclinó para susurrarle al oído, y él al notar su movimiento se mordió el labio para no gemir.

- Soy tuya, en todos los aspectos. Así que sigo siendo tu secretaria…
- Esta bien. Rafa, haz lo que quieras. ¿Qué? Si, vale, en 5 minutos estoy allí.

Colgó, y Sandra se meció sobre su regazo haciendo que Carlos aflojara un poco la mano sobre su cadera.

- Tú no vas a ninguna parte.
- Tengo una reunión con el director adjunto de Mechanics SL y…

Sandra no le dejo terminar, se dejó caer, empalándose con fuerza y lo beso.
Lo beso con toda la pasión acumulada de todos estos años.
Carlos se resistió al principio, pero al final la rodeo con sus brazos, estrechándola más contra él y profundizando el beso.
Al separarse de ella, capturo su labio inferior, dándole un suave mordisco.

- Tenemos que hablar.

Sandra asintió.

Si su Carlos quería hablar, hablarían. Estaba deseando aclarar las cosas para comenzar una relación en serio.
Carlos se levantó a la vez que salía de su interior haciendo que Sandra gimiera. Con cuidado la dejo en el suelo.

- Joder. No puedo creer que me haya dejado llevar así en la oficina.

Miro su mesa y se dio cuenta de que la mitad de sus cosas, estaban tiradas por el suelo.
Sandra sonrió feliz. Le encantaba saber que había perdido el control así, por ella. Carlos se arregló la ropa mientras ella hacía lo mismo.

- ¿Podemos hablar luego? ¿En tu casa?

Sandra asintió, sintiendo mariposas en el estómago.

- Estaré esperándote.

Carlos abrió la puerta y antes de que salieran Sandra le susurro bromeando.


- Saluda a mi cuñado de mi parte, ¿quieres?

miércoles, 16 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 28

Sandra cerro los ojos de puro placer al notar a Carlos encajado en su interior. Llenándola como nadie antes la había llenado. Encajaban a la perfección y…

- Abre los ojos.

Obedeció, perdiéndose en esa mirada azul intenso.

- Quien soy.

Sonrió. ¿Carlos aún se preocupaba por eso?
Estaba a punto de decirle que lo quería a él, a Carlos, a su mejor amigo, pero él la embistió con fuerza, haciendo que jadeara.

- Quien soy, Sandra.
- Carlos. Eres Carlos.
- No.
- ¿No?
- No.

Carlos gruño con cada embestida.

- Soy. Tu. Dueño.

¡Joder sí!

- Dilo, Sandra. Ahora.
- Soy. Tu. Dueña.

Sonrió por dentro, eso le sacaría de sus casillas. Gimoteo frustrada cuando Carlos dejo de moverse y apoyo la frente en la suya.

- Eso siempre lo has sido. Ahora dime. ¿Quién soy Sandra?

Volvió a moverse pero su confesión la había dejado de piedra.

- ¡Sandra!
- Mi dueño – susurro. – Eres mi dueño.

Con esas palabras, Carlos se movió con más fuerza y rapidez, tragándose el grito de Sandra cuando los dos se corrieron a la vez.

*-*-*-* 

Sin soltarla y sin salir de su interior Carlos fue hacia su silla y se sentó, con ella a horcajadas sobre él. Aún estaba completamente vestido, menos donde estaban unidos. Jamás había hecho algo así en el trabajo y volvió a apoyar su frente en la de Sandra. Pero que estaba haciendo, reclamándola así, ¡y en la oficina!
Abrió los ojos cuando noto que Sandra le estaba dando besos suaves por toda la cara y cuello.

- ¿Sandra?
- ¿Mhm?
- Sandra para.

Dudosa, ella se detuvo y se incorporó un poco.

- Tenemos que hablar ¿no crees?

Ella tuvo el descaro de negar con la cabeza.

- No hay nada de qué hablar. Soy tuya. Y tú eres mío. Soy tu dueña, y tu señor Márquez, eres mi dueño.

Sus palabras eran un bálsamo para sus oídos, pero…

- ¿Y qué pasa con Rafa?

Sandra sonrió, la muy descarada.

- Pues con Rafa, no pasa nada, que yo sepa.
- Estas enamorada de él.

Sandra frunció el ceño.

- ¿Realmente piensas tan mal de mí que crees que estando enamorada de otro, me acostaría contigo?
- Bueno es que yo me parezco a él físicamente y…
- Y él se parece a ti físicamente.

Carlos la miro con los ojos entrecerrados.

- Que quieres decir con eso.

Sandra se mordió el labio y su polla latió en su interior, haciéndola gemir.
Abrió la boca para decir algo pero el sonido del teléfono la interrumpió. Sin moverse y aguantándola por la cadera para que no se moviera, descolgó.

- ¿Si? Ah Rafa dime.


La observo mientras hablaba con su hermano para ver su reacción. Necesitaba saber si ella sentía algo por su hermano, o no.

domingo, 13 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 27

Carlos se levantó confuso.
¿A que estaba jugando Sandra?
Rodeo su mesa y se colocó detrás de ella, que no se había movido, aunque su respiracio cada vez era más agitada.
Sabía que no debía hacer esto, y menos en el trabajo, que debía mantener las distancias pero esta pequeña bruja lo desafiaba como nadie.
Carlos puso las manos sobre sus muslos y comenzó a subirle la falda que llevaba puesta. No protesto.

- No soy Rafa.
- Lo sé.
- No soy ningún sustituto, de Rafa.
- Créeme, que lo sé.
- Soy muy exigente.

Sandra bufo.

- ¿Que estás jugando al juego de decir lo obvio?

Carlos sonrió a su pesar, mientras seguía subiéndole la falda y acariciando la suave piel que esta había escondido. Chasqueo la lengua.

- Esa boquita, señorita…

Sandra jadeo cuando la falda subió por encima de sus caderas, dejando su trasero al aire.
Carlos gimió al verlo y su brazo se movió solo, dejando la marca de su mano sobre un cachete.
Ella jadeo con fuerza al notar el picor pero gimió cuando Carlos acaricio la marca y se agacho para besarle, y lamerle, suavizando así el escozor.

- Me encanta ver tu culito así, con la marca de mi mano, tan coloradito…

Sandra no dijo nada pero arqueo la espalda.
Carlos tenía que poseerla, hacerla suya. No se podía resistir más.
Le arranco el tanga y le dio la vuelta, sentándola sobre su escritorio.
La miro y vio fuego en su mirada, el mismo fuego que él sentía por ella.
Se desabrocho el pantalón y sin más preámbulos, sabiendo que ella estaba más que mojada por él, la penetro.


Rafa entro en su oficina con un humor de perros. Ver a Laura sentada delante de la oficina de su hermano en vez de la suya lo enfureció como nada.
Laura era suya, maldita sea.
- Laura, ¿dónde está mi secretaria?
- Eh… con su hermano.

Arqueo las cejas,

- ¿Llevan mucho tiempo ahí dentro?
- Como 20 minutos, señor.

Miro la puerta detenidamente, preguntándose qué estaba pasando exactamente entre su hermano y Sandra.

- Pasa a mi despacho por favor Laura. Tráeme un café, si puedes, ¿vale?

Vio la duda en su mirada de la chica antes de que esta asintiera.

- Ahora mismo, señor.

La observo mientras iba hacia la pequeña cocina que tenían. Tenía buen cuerpo, aunque hacia lo posible por ocultarlo. ¿Por qué?
Se movía con elegancia y eficacia y Rafa se pilló a si mismo comiéndose a su secretaria con la mirada. Algo que se había jurado a sí mismo, no volver a hacer.
Por eso Carlos había contratado a Laura.
La sosa pero eficiente Laura.
Miro de nuevo la puerta de su hermano, esperando que no destrozaran demasiados muebles. Si estaban haciendo lo que él pensaba que estaban haciendo... Conocía los gustos sexuales de su hermano, y aunque no se dejaba llevar a menudo, cuando lo hacía, se convertía en un salvaje.

Solo esperaba que su Sandra pudiera seguirle el ritmo.

viernes, 11 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 26

Carlos escucho su voz desde su despacho y se estremeció.
Cerró los ojos con fuerza.
La necesitaba.
La echaba de menos.
Pero no se podía permitir el lujo de verla. Al menos por el momento. Joder, si estaba duro solo de oír su voz.
Y ella estaba enamorada de su hermano, no podía olvidarse de ello.
Apretó la mandíbula. No podía deja de repasar aquella noche con ella… los orgasmos que le había dado… y ese cajón lleno de juguetitos…
Se froto la cara con las manos. Tenía que dejar de pensar esas cosas porque se iba a volver loco. Apretó un botón en la mesa

- Laura, tráeme un Expresso por favor.

La verdad era que no se había esperado ese lado de Sandra, pero le gustaba, le gustaba mucho. Y si antes se creía enamorado, ahora, estaba perdido. Era la mujer perfecta para él, en todos los sentidos. Pero ella quería a su hermano, lo había usado porque se parecían físicamente, pero ella no lo quería a él. No de esa manera. Ella lo quería como amigo, y aunque eso lo podía respetar, dolía un huevo.
Por ello había obligado a Rafa a cambiar de secretaria. Para no tener que tratar con ella directamente.
Volvió la vista al ordenador, necesitaba ponerse al día después de una semana fuera. Sabía que poner a Sandra a trabajar al lado de Rafa solo haría que terminaran juntos en la cama pero…

- ¿Se puede saber por qué coño ya no soy tu secretaria?

*-*-*

Sandra estaba furiosa.
Rafa aún no había llegado así que se había sentado en la mesa antigua de Laura a esperarlo. Hizo como que empezaba a trabajar, disimulando, y aprovecho cuando Laura se levantó para ausentarse de su mesa.
Ahora estaba en la oficina de Carlos, que la miraba con indiferencia.

- Creí haberle dicho a Laura que no te dejara pasar.
- ¿Qué coño te pasa Carlos?
- Nada.
- ¿En serio vas a pasar de mí? ¿Vas a decirme que esa noche no significo nada para ti?
- No sé de qué me hablas.
- ¿Que no sabes…? ¡Pero serás imbécil!
- Se está tomando muchas libertades conmigo señorita. Debería recordar que soy su jefe. Y que aun esta de prueba en esta empresa.

Sandra bufo.

- Y que vas a hacer, ¿echarme?

Laura entro justo en ese momento con un café.

- ¡Sandra! ¡Te pedí que no entraras!
- Lo siento Laura pero necesito hablar con él.

El silencio se hizo incomodo hasta que Carlos asintió y Laura se marchó, dejando el café sobre la mesa y cerrando la puerta al salir, dándoles intimidad.
Carlos se quedó mirándola, sin decir nada y la intensidad de esa mirada le causo escalofríos.
Ella insistió.

- ¿Y bien?
- ¿Y bien, que, señorita?
- Uy Carlos… ¿Me vas a decir porque no me has respondido a las llamadas, porque te fuiste de mi casa después de hacerme el am… lo que me hiciste?
- Te vas a ganar unos azotes como sigas así.

Sandra arqueo una ceja. De jefe borde, a dominante sexy en menos de un minuto. Su tanga se había empapado de inmediato al oír esas palabras. Necesitaba cabrearlo más, Necesitaba hacerle perder el control.
Sacarle ese lado dominante que a ella le gustaba tanto.

- ¿Ah sí? ¿Y me dolerá? ¿O vas a hacer que me guste?

Carlos gruño pero no dijo nada.

- ¿Me vas a dejar el culo tan colorado como la última vez?


Sandra se mordió el labio y se inclinó hacia delante en su mesa, sonriendo triunfal al ver la vista de Carlos bajar a su escote.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 25

Una semana más tarde, Sandra estaba de los nervios. No sabía nada de Carlos desde que hicieron el amor y al final había estado tan ocupada con el trabajo que no le había dado tiempo de mandarle ningún email personal.
De todas formas, si había huido así como un cobarde y ni siquiera era capaz de ponerse en contacto con ella… muy arrepentido tenía que estar.
El viernes anterior había sido el primero en años en el que no se habían visto, y ella había pasado la noche en su casa para sentirse más cerca de él. Eso le partía el corazón.
Y ya había decidido que so hoy no había vuelto a la oficina, hablaría con Rafa, averiguaría donde estaba, y lo buscaría hasta en el fin del mundo si hacía falta. Este no se le iba a escapar.
Llego a la oficina y se sorprendió al ver la puerta de la oficina de Carlos entreabierta. Su corazón latió más fuerte.
¿Había vuelto?
Se fue a sentar a su mesa pero se dio cuenta de que no podía, ya que Laura estaba sentada en ella.
¿Pero qué demonios…?

- Buenos días Laura. ¿Que…?
- ¡Sandra!

Se sonrojo y la miro con una mueca en los labios.

- ¿Qué pasa, porque estas sentada ahí? ¿Ha vuelto Carlos?
- Eh, sí, pero no puedes pasar. Eh… Rafa te explicara todo. O eso me han dicho.
- Y una mierda.

Fue hacia la puerta de Carlos pero Laura se colocó delante de ella, bloqueándole la entrada.

- Laura, quítate.
- No puedo Sandra. Me ha ordenado que no te deje pasar.
- Pero será capullo. – mascullo.

La chica estaba al borde de las lágrimas, por lo que Sandra decidió dejarlo. Por ahora.


- Está bien, iré a ver a Rafa a ver qué coño está pasando aquí.

lunes, 7 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 24

Carlos estaba borracho. Lo sabía, y era patético.
Aun así, pidió otra copa en el bar del hotel donde se alojaba.
Imágenes de la noche que había pasado con Sandra lo atormentaban y ni el alcohol ni la distancia hacían nada para remediarlo.
Sonó su nuevo móvil y por un instante la esperanza de que fuera ella, lo abrumo, hasta que se acordó que solo su hermano tenía este número.

- ¿Qué?
- Hola hermanito, ¿Qué tal tu viaje de negocios?
- ¿Qué quieres Rafa?
- Tu chica está destrozada. ¿Me vas a decir que paso entre ustedes?
- No es mi chica. Y no, no te voy a contar nada.
- ¿Estas borracho?

La incredulidad en la voz de su hermano, era evidente.

- Sip. Jodida-y absolutamente trompa.
- ¿Que paso Carlos?


El tono de Rafa se suavizo.

- Venga ya, sabes que me lo puedes contar. ¿Crees que no me he dado cuenta de lo que sientes por ella desde hace años?
- ¿Qué? No… no sabes nada.
- Madre mía Carlos, parece que el alcohol ha absorbido tu inteligencia. ¿Pero por qué crees que le pedí salir para luego dejarla plantada, el viernes?
- Yo… No sé.
- Sabía que Sandra iría corriendo a tus brazos. Y así fue, ¿o no?

Carlos se pasó una mano por la cara.

- Sí.

Se aclaró la garganta.

- Si, me llamó.
- ¿Y…?
- Y nada. No es asunto tuyo.
- Vamos cuenta. ¿Qué paso – te rechazo? Por eso estas así?
- No.

Su voz se apagó.

- No me rechazo Rafa. Más bien todo lo contrario.
- ¿Te acostaste con ella entonces?
- Sí.
- ¿Y…?
- Y nada.
- ¿Nada? Por eso tu estas borracho al otro lado del mundo y ella está aquí que parece un zombi. Hermanito… empieza a hablar anda.


Y así, a regañadientes, Carlos se lo conto todo.

domingo, 6 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 23


Sandra leyó y releyó la carta. Aun lo estaba haciendo cuando Laura llego a la oficina, media hora después. Una mirada a su amiga y esta fue hacia su lado, preocupada.

- Sandra cariño, ¿qué te pasa?

Sin palabras, ya que tenía la garganta seca, le dio la carta. Laura la leyó rápidamente.

- Bueno, que yo sepa no tenía ningún viaje de negocios preparado así que, ¿porque no me cuentas que paso el viernes, exactamente?

Sandra se lo contó todo. Se alegraba de tener una amiga en la que poder confiar, en poco tiempo, se habían hecho muy amigas. Noto la expresión de dolor cuando le contó el papel de Rafa en todo esto.

- No lo quiero a él, Laura. No me di cuenta hasta el viernes, pero nunca se trató de él. Y ahora… no sé cómo recuperar a Carlos.
- ¿Por qué no le escribes un email? De todas formas tienes que estar en contacto con él para confirmarle que has hecho tus tareas. Y como está trabajando, los leerá así que le puedes mandar uno diciéndole cómo te sientes, y a ver que te dice.

Sandra lo pensó un momento, tenía sentido, aunque la verdad era que necesitaba saber lo que sentía Carlos antes de abrirle su corazón y confesarle todo lo que sentía por él.

- ¡Laura!

Su amiga puso los ojos en blanco al escuchar la voz de Rafa.

- El jefe me reclama. ¿Estarás bien?
- Si, gracias por escucharme.

Laura le sonrió.

- Si necesitas algo, déjame saber.
- Lo hare.


Necesitaba a su Carlos, pero dudaba que Laura la pudiera ayudar en eso…

viernes, 4 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 22

Sandra temblaba por dentro. Llevaba todo el fin de semana intentando encontrar a Carlos y no había ni rastro. No cogía el móvil, ni el teléfono y cuando fue a su casa, nadie abrió la puerta, por lo que entro con su llave. La casa estaba como siempre, pero su móvil estaba encima de la mesa del salón. En el dormitorio se dio cuenta de que faltaba algo de ropa. ¿Tan horrible le había parecido el estar con ella, que había tenido que huir?
Esperaba que hoy pudieran hablar, ya que sabía que al trabajo no faltaría, siendo tan responsable como era.
Dejo su bolso sobre su mesa y vio que Laura aún no había llegado, pero Rafa sí que estaba en su oficina. Que extraño, pensó.
Tomo aire y se preparó para llamar a la puerta de Carlos.
Nada.
Abrió la puerta. ¿Carlos aún no había llegado?

- No va a venir.

Sandra se dio la vuelta y miro a Rafa. Aliviada se dio cuenta de que realmente no sentía nada por él. Ni mariposas en el estómago, ni corazón desbocado, nada. Que tonta y ciega había estado.

- ¿Donde esta?
- Viaje de negocios. ¿Se puede saber qué diablos ha pasado entre ustedes?

Sandra arqueo una ceja. Este era el hombre que la había dejado tirada. Gracias a él había descubierto lo que sentía por su mejor amigo. Rafa sabia más de lo que daba a entender.

- No ha pasado nada.
- Y una mierda. Mira nena, no te di planto en otro día para que humillaras a mi hermano, así que más te vale arreglar esto entre los dos.
- ¿Qué quieres decir?

Rafa la ignoro.

- Dejo esto para ti.

Rafa le dio una carta y cuando parecía que iba a decir algo más, cerro la boca y volvió a entrar a su oficina. Mirándola por encima de su hombro, clavo la mirada en ella.

- No le hagas daño Sandra.

Cerró la puerta de su oficina dejando a Sandra confusa. Abriendo el sobre, se preguntó que se encontraría.

Sandra,
He tenido que salir del país por algunos asuntos de negocios. Te he mandado varios emails con tareas que deberían mantenerte ocupada hasta mi regreso. Si no es así, pregúntale a Rafael que te dará algo que hacer.
Sobre lo del viernes, lo siento mucho, no debí dejar que pasara así que olvidémoslo. Sera como si nunca hubiera pasado.
Carlos.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 21

Sandra sonrió satisfecha, le dolían un poco los brazos y Carlos pesaba un poco encima de ella pero no se pensaba quejar. Todo era perfecto.
Ahora su mejor amigo era su amante y quizás podrían ser algo más. Mucho más.

- Dios, te estoy aplastando, lo siento.

Carlos se levantó rápidamente, haciendo que ella jadeara cuando salió de su interior. Rápidamente se puso los pantalones y se acercó a ella para soltarle las esposas. La actitud de Carlos había cambiado de amante atento a jefe frio y a Sandra no le gustaba nada ese cambio. Se tapó con la sabana, sintiéndose incomoda.

- Lo siento Sandra, yo… Se lo que sientes por mi hermano. No me tenía que haber aprovechado así de ti. Lo siento.

Se había terminado de vestir y así sin más, salió del dormitorio, sin mirarla.

- ¡Carlos!

Sandra bajo las escaleras detrás de él, envuelta en la sabana.

- Carlos, ¿a dónde crees que vas?

¡Ni siquiera la miraba!

- Carlos por favor, estate quieto un momento. Joder. ¡Carlos!

La puerta de su casa se cerró en su cara.
Pero bueno, ¿qué demonios acababa de pasar?

*-*-*

Carlos se metió en su coche y se alejó de allí tan rápido como pudo.
¿Que acababa de hacer?
Lo había estropeado todo. La había cagado.
Aun temblaba por dentro.
Sandra era todo y más de lo que buscaba en una mujer y ahora la había perdido. ¿Cómo podían seguir siendo amigos después de lo que había pasado?
Su móvil comenzó a sonar y supo que era ella. Con todo el dolor de su corazón, lo apago y se lo guardo.

Necesitaba estar solo. Y necesitaba pensar en todo lo que había pasado.

martes, 1 de octubre de 2013

Mucho mas que amigos - Capítulo 20

A duras penas obedeció, mirándole directamente a esos ojazos azules. Quería gritar que sabía de sobra con quien estaba y quien era quien le estaba haciendo el amor.
Nadie jamás la había podido hacer sentir así. Solo él. Solo su mejor amigo, el hombre al que quería con locura, aunque no se hubiera dado cuenta hasta ahora.  Pero entonces, el comenzó a moverse. Su polla entraba y salía de su interior con facilidad por lo mojada que estaba. Nunca había estado tan cerca del orgasmo tan pronto, y Carlos parecía saberlo.

- Vamos nena, córrete para mí. Quiero sentir como explotas a mí alrededor…
- Dios Carlos, más rápido… ahhh dios. ¡Más! Más fuerte. ¡Te necesito más fuerte!

Carlos ralentizo sus movimientos.

- No, por lo que tu más quieras, no te pares!
- ¿Sandra?
- ¡Que!

Estaba frustrada y mosqueada. Porque no se movía?
Carlos le dio un suave mordisco en el labio inferior.

- ¿Dónde estamos?
- ¿Qué? Eh… en la cama.
- Y en la cama, ¿Quién es el que manda?

Sandra no se lo podía creer. Pero ¿Qué clase de tortura era esta?

- Tu, Carlos. Mandas tú.
- Eso es. Así que si yo quiero ir más fuerte, iré más fuerte. Y si digo que te corras, te corres. ¿Me has entendido?
- Si, pero…
- Nada de peros.

Se hundió en ella con fuerza, haciéndola gimotear.

- ¿Me has entendido?
- Si, si si, Carlos, por favooor!
- Así me gusta peque. Que me ruegues.

Se empezó a mover de nuevo con más fuerza y Sandra gimió, mordiéndose el labio.

- Vamos pequeña, córrete para mí.
- Yo… no… puedo. Necesito… ¡más!

Carlos siguió embistiéndola con más fuerza y con su boca encontró un pezón, que chupo con fuerza. Eso hizo que por fin Sandra se corriera a su alrededor, provocándole su proprio clímax. El más intenso que había tenido jamás.
Se desplomo encima de ella, respirando con dificultad.

Dios, ¿que había hecho?