Rebeca respiro hondo y
abrió la puerta. Ver a Ethan después de todo casi la hace llorar otra vez, pero
tenía que ser fuerte, que él no viera cuanto le dolía.
- Hey Becky.
Rebeca le dio una bofetada con todas sus fuerzas. El movimiento fue tan rápido
que ni lo vio venir. Su cara de sorpresa hubiese sido graciosa, si no le
doliese tanto la mano...
- Eso por no decirme que estabas casado, ¡gilipollas!
Ethan vio la intención de Rebeca de cerrar la puerta y la bloqueo con su pie.
- Becky. Rebeca, escúchame.
La vio dudar, pero entonces soltó la puerta de golpe haciendo que Ethan
tropezara hacia delante. Casi pierde el equilibrio, pero se agarro a la puerta
rápidamente, y se enderezo. Cerro con suavidad y siguió a Rebeca hacia el
salón, donde lo esperaba golpeando el suelo con un pie, brazos cruzados y un
mohín en los labios. Ethan nunca la había visto tan adorable.
- ¿Que quieres Ethan?
- Hablar. Explicarte...
- ¿El qué? ¿El por qué no me dijiste que estas casado?
- Estaba casado...
Pero Rebeca no le dejaba hablar.
- El porqué has quedado con ella?
- Yo...
- ¿Te la has follado? ¿Te la has follado como me follaste a mi esta misma
mañana?
Lo había ofendido. Rebeca lo veía en sus ojos, pero no pensaba disculparse.
- Hace mucho que no me follo a mi ex mujer.
Se acerco a ella agarrándola por los brazos superiores y acercándose mucho.
Tanto, que sus alientos se mezclaban. Tanto, que podía notar su excitación...
Pero esa excitación, ¿era por ella... o por su ex?
- Hace mucho que no quiero follarme a mi ex mujer...
Soltó sus brazos acariciándola lentamente.
- ¿Es que no te has enterado, mi preciosa Becky? Yo solo te deseo a ti.
Rebeca quería creérselo, realmente quería, pero... Los labios de Ethan sobre
los suyos, la sorprendieron.
- Ethan...
- Te deseo Becky.... aquí y ahora. Luego hablamos todo lo que tu quieras, pero
ahora mismo, necesito estar dentro de ti.
Rebeca gimió al escuchar sus palabras y notar sus manos acariciando su pecho.
La volvió a besar, tragándose un nuevo gemido. El beso se hizo cada vez más
intenso a medida que las caricias de Ethan se volvían más urgentes.
Ethan le pellizco los pezones y gruño.
- Dios... la próxima vez usamos los juguetitos que van aquí...
Se imaginaba a Rebeca con unas pinzas para los pezones, con cara de placer...
Le quito la ropa rápidamente, no podía esperar más.
- Rodéame con las piernas.
Ethan dio la orden a la vez que la elevaba, posicionando su dura polla justo a
la entrada de su coño. Estaba más que preparada para el, y en un fluido
movimiento, la penetro. Se quedo quieto solo un instante.
- Ahora dime, mi preciosa Becky... ¿quieres que te folle... o que te haga el
amor?
Rebeca sonrío y le susurro su respuesta.
- Las dos cosas...
Abalanzándose sobre el, le beso apasionadamente, empezando a mover las caderas
mientras el la sujetaba. Pronto sus movimientos se volvieron frenéticos y
salvajes, llevándoles a un arrollador orgasmo que alcanzaron juntos en el mismo
momento. Sudados y respirando con dificultad, Ethan la abrazo más fuerte. Sin
salir de su interior, subió las escaleras, causando una deliciosa fricción que
hizo que Rebeca deseara repetir. Con cuidado se tumbo con ella en la cama.
- Me tienes loco Becky.
Ella lo miraba, mordiéndose el labio inferior.
- No te imaginas cuanto te quiero.
Antes de que ella pudiera responderle, Ethan comenzó a moverse de nuevo,
haciéndola que perdiera el hilo de sus pensamientos. Esta vez, sus movimientos
eran lentos y sensuales. Esta vez, Ethan le estaba haciendo el amor.
Rebeca estaba entre los brazos de Ethan, completamente saciada y feliz. Pero
aun así, quedaba un asunto no resuelto entre ellos y no se pudo quedar callada
por más tiempo.
- ¿Ethan?
- Dime, mi amor.
Se inclino para mirarlo.
- ¿Me vas a decir que quería tu ex?
Que divino!!!!.... El la fue a buscar, aguanto su bofetada y le dio lo que ella le pidió...
ResponderEliminarVeremos ahora que sucede en el capi siguiente....